Diez años sin Elena Belmont
Hasta que, diez años atrás, Elena Lucas de Belmont decidió que ese era el día. Un jueves de otoño. Elena, que supo -y sabe- cobijarnos bajo sus alas de ángel clandestino. Elena, que supo nombrar nombres y cosas que aparecían -y aparecen- ante la convocatoria de su dulcísima y frágil voz. Elena, transparente y con alas y con una enorme cicatriz en su pecho de pájaro herido, murió el 5 de mayo de 2005. Un jueves de otoño. Como en el poema de César Vallejo, Elena supo morir un jueves. "Jueves será, porque hoy, jueves, que proso / estos versos, los húmeros me he puesto / a la mala, y jamás como hoy, me he vuelto, / con todo mi camino, a verme solo", escribió Vallejo. Misterio y poesía.